¡Nuestro primer mural en Zaragoza! Y qué desafío, 40ºC a la sombra, pero superado con todo el esfuerzo y cariño del mundo. Hemos transformado varias zonas del colegio: la fachada, el pasillo de Infantil, el vestíbulo de entrada y las escaleras de acceso a Primaria. Cada mural tiene su propia identidad, pero todos están conectados por una misma paleta de colores para lograr una identidad visual coherente y alegre.
En el exterior hemos representado todas las etapas del alumnado, desde Infantil hasta Bachillerato. Figuras llenas de vida, rodeadas de naturaleza, pensadas para transmitir los valores y la energía del centro, que se siente en cada rincón.
En el pasillo de Infantil, animallillos y flores acompañan a los más pequeños cada día, despertando su curiosidad y creando un entorno acogedor y lleno de magia.
En el vestíbulo, dos murales: en el primero, un grupo de niños y niñas alrededor de un gran corazón azul representan la diversidad del alumnado y cómo los valores de igualdad, amistad y respeto se viven en el día a día del colegio. En el segundo, unas figuras en torno al globo terráqueo nos cuentan que éste es el mejor colegio, no del mundo sino PARA el mundo.
Por último, las escaleras se han convertido en un espacio abierto al cielo, con personajes a bordo de avioncitos de papel, lápices voladores y globos que hacen divertida y agradable la subida a clase.
