Gracias a este proyecto, impulsado por el Ayuntamiento de Torrox en el marco del 8M, hemos transformado todos los espacios educativos de Torrox a través del arte participativo, llenando de color y significado los muros de los colegios e institutos y fomentando la creatividad del alumnado. A lo largo de seis murales, esta iniciativa ha embellecido los centros y ha transmitido valores como la diversidad, el respeto y la igualdad.
Cada mural es una herramienta pedagógica y un símbolo de identidad para cada centro. Los diseños han sido desarrollados a partir de las ilustraciones del propio alumnado, seleccionando las partes más expresivas y atractivas para crear una composición única. De este modo, cada mural refleja el espíritu de su comunidad, mientras forma parte de un relato común que conecta a todos los centros participantes.
Para unificar el proyecto y reforzar su mensaje, todos los murales comparten una paleta cromática similar, asegurando una armonía visual y facilitando el reconocimiento del conjunto. Esta decisión permite que, a pesar de la diversidad de diseños y soportes, el proyecto se perciba como un todo coherente y significativo. Hemos dado importancia a la gama de violetas, fucsias y morados, símbolos de la igualdad, acompañados de azules y blancos que aportan tranquilidad y amplitud y pequeños toques de amarillo y rojo que añaden viveza y energía a las escenas.