Este muro en La Elipa, de largo recorrido, fragmentado, con diversas alturas y rodeado de pinos fue un amor a primera vista. Planteamos un diseño con figuras de gran formato que reflejan alegría, inclusión, igualdad, amistad y convivencia, junto con ideas como el cuidado y la conexión con el medio ambiente, los juegos y deportes de patio, la lectura y la imaginación. Los personajes grandes permiten abarcar grandes zonas de pared, aprovechando las partes de más altura, amplitud y visibilidad para colocar las cabezas y así también se aprecia bien desde la calle. Los colores que rodean el cole (pinos a un lado, verja granate al otro) marcaron la elección de la paleta para el mural, y aunque no es la más habitual estamos muy contentos de cómo los verdes, azules, rojos, rosas y burdeos conectan y armonizan con el entorno.